02 septiembre 2006

Tras la siesta

Diario de viaje: Carcassonne. La hora del microrrelato.











"Cuando despertó,
el dinosaurio todavía estaba allí"
(Augusto Monterroso)

Fotografía: José Luis Hernández

4 comentarios:

mena dijo...

Joder, ahora recuerdo a Juanjo (nuestro querido "Robot") recitando el Julio César de Shakespeare en Roma. Lo digo porque creo que iba a hacer su doctorado sobre el microrrelato... qué tiempos...

Robles dijo...

Vaya, es cierto. Qué será del marqués? Te acuerdas cómo nos sorprendió la noche aquella en la que se enroscó en la colcha y se puso a recitar el monólogo de Marco Antonio.
"Amigos, romanos, compatriotas, prestadme atención: vengo a sepultar a Cesar, no a elogiarle. El mal que hacen los hombres, vive después de ellos; el bien, muchas veces, queda enterrado con sus huesos: sea así con Cesar..."
Qué grande! Creo que dejó el microrrelato. Este verano también me acordé de él en su papel de Marco Antonio. Estuve de viaje en Córdoba y visité las ruinas de Medina Azahara. Allí hay una plaza rodeada por columnas que me hizo pensar en la Roma Imperial...de ahí a recitar los versos que tan bien conocía Juanjo sólo había un paso... y me arranqué!
Pensé en este post en tierras gabachas. Despertamos tras una siesta y un dinosaurio de goma estaba allí, mirándonos, expectante...y Monterroso me vino a la memoria. Qué cosas...!

mena dijo...

Tienes razón, al final dejó el doctorado. Un día me lo encontré en Diagonal y me dijo que estaba currando con su padre, que no le habían becado y que pasaba de estar más tiempo sin trabajar mientras estudiaba.
En fin, que hay que tener mucho cuidado cuando uno va a Francia, pues pueden aparecer cosas muy raras...

Robles dijo...

Jaajajaja! Es cierto, fuimos a vengarnos por lo del mundial, pero al final no la armamos.